No sé que es lo que me pasa contigo, pero aquí me tienes desnuda ante ti, postrada, lista para que me embistas, para sentir que me dominas cuando en realidad soy la que te domina a ti.
Estoy lista para acariciar tu cuerpo, sentir tu suave piel bajo mis manos, dejar me voltees, tomes mis manos y me penetres así, primero suave, con calma y cuando menos piense me des duro, fuerte, sentir como tu pene llega a lo más profundo de mi ser, sentir que me mojo más y más en cada embestida, decirte que no pares, que sigas así, que me encanta la fuerza con la que me penetras, dejar que mis lágrimas corran de tanto placer y al final cuando ambos estemos sin fuerza, volver mi cuerpo hacia tí y besarte con tanta dulzura que no sabrás si es por amor o simple y llano deseo.
Sé que deseas este lista para ti y es lo que te daré en nuestro próximo encuentro.
3 comentarios:
que rico esta tu texto, sabes me trae bellos reucerdos, sobre todo
en la parte que dices:
" la lista para que me embistas, para sentir que me dominas cuando en realidad soy la que te domina a ti"
aush que riiicoo mmmmm
recuerdos, llegaron a mi mente
besos nena!
aggggggggg. Comenzamos.
Esa pose es quizàs la preferida, enturbias mi mente mi espìritu y me desplazo en las colinas de la fantasìa de la carne trèmula, dura, en ese paraìso de montes bañados de vellos que saboreo con mi boca, los ensalibo, penetro con la magnitud del uròlogo para hacer el tacto vaginal, y descubro la suave seda de tus lìquidos viscosos, que al igual los lamo con goce especial. Tus oiernas, ahhh tus piernas, esas extremidades celestiales que nunca me canso de verlas, los dedos de tus pies, encarnados dentro de mi boca, masajeados con la lengua que no tiene fin, el glande entrado en tus labisos, en esos labios que encarnan en la penetraciòn suave y violenta, en esos labios vaginales que beso con la detreza de un viejo lobo de mar. Un marinero perdido en los Ocèanos de la misteriosa caida del placer celestial que me da observarte, observarte, y jamàs dejar de verte.
Superchika, esos ricos recuerdos son imborrables, me da gusto te haya hecho volver a sentir.
La Nada, tus palabras siempre llenan todos los sentidos.
Les espero de nuevo.
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