Hoy saqué mi lado oculto

Hoy me puse mis mejores zapatillas para ti, esas rojas con tacón de aguja que tanto te gustan, me puse minifalda, deje mi cabello ondulado suelto, no quisé ponerme ropa interior, creo que perdería el encanto para esta ocasión con ella en mi cuerpo.

Llegaste puntual a la cita, me saludaste con un beso en la mejilla, pero antes de que terminará el saludo roce tus labios con los míos, esos labios que hace tanto no sentía. Te hice una señal para que te acercarás de nuevo, te di un beso profundo, donde mi lengua jugaba con la tuya, tenía tantas ansias de ti que no me importo estar en un lugar público.

Me senté a un lado tuyo, con una sonrisa pícara te dije "no traigo ropa interior", me miraste sorprendido, era la primera vez que me portaba tan deshinibida, tan segura de mi misma. Este tiempo sin vernos me hizo darme cuenta que tenía una fiera dentro de mí, una mujer llena de lujuría, una mujer que quería sacar ese lado oculto que no se atreve a mostrarlo todos los días, pero hoy desde que nos pusimos de acuerdo para ir a cenar, me di cuenta que podría realmente sacar a relucir mi lado cachondo, que necesitaba te dieras cuenta que había ampliado mi mente y estaba dispuesta a hacer realidad tus fantasías.

Me dijiste: -Vamos, salgamos de aquí, te respondí de nuevo con la mejor sonrisa que te podía ofrecer y callando tus labios con mis dedos con un susurro a tus oídos te dije: -No corazón, hoy, sólo hoy vamos a cenar, dejemos este rico juego para mañana, aún cuando hoy me muera de ganas por estar contigo.