Hasta hoy no había conocido a nadie tan sexy, tan sensual, pero a la vez tan serio en su forma de expresar, en su forma de mirar, en su forma de actuar. Haces que mis más bajos pensamientos e instintos quieran salir al momento de verte frente a mí.
Haces que mi boca busque con desesperación la tuya. Haces que me moje con el sólo hecho de saludarme, abrazarme y decirme "hola sexy, ¿cómo estas?, te extrañe este fin de semana", porque ese saludo lleva ímplicito las ganas que tienes de estar conmigo. Lo lleva ímplicito porque te siento, porque veo como crece tu virilidad al pegar tu cuerpo al mío.
Haces que mi mirada se ilumine con tu pícara sonrisa, que me vuelva loca el negro de tus ojos, haces que quiera saltar sobre ti al decirme "me consolaba leyendo tu blog, viendo tu foto, extrañando tu sonrisa y tu cuerpo".
Tienes esa capacidad de decir justo las palabras que quiero y necesito escuchar para derretirme ante ti y eso... eso que hace poco tiempo te conocí.
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